POZO SÉPTICO (Temas Intrascendentes)

martes, febrero 07, 2006

GUIÑOL SEGUNDA PARTE

Califique este Post

Guiñol sacó pues visa para un sueño en el consulado de la Ilusión y también su pasaporte a la Alegría en la Embajada del bebe, con el fin de embarcarse en un viaje de descubrimiento del mundo. Cuentacuentos cuentero que soy, les quiero contar que Guiñol, nuestra valiente heroína, tiene miedos como todos nosotros los tenemos de vez en cuando. El principal miedo de Guiñol estaba encarnado en un cierto hechicero brujo con quien Guiñol tenía cuentas que saldar, como lo relato a continuación…

Guiñol brincaba de rama en rama, sintiéndose libre, radiante. Acababa de convertirse en toda una mujer tras sorprender al sol iluminando su propio porvenir y el de Fernando Gómez Agudelo, entonces asesor de Luis Morales Gómez y futuro Minhacienda del gabinete de Rojas Pinilla. Sintiéndose y consolidándose como hembra, Guiñol se sabía fruta, se sabía muchacha de pezón erecto y de zapote prieto.

Tomando las riendas de su nueva situación, Guiñol decidió sacar partido de la misma y fue en busca de un hombre que, atraído por sus encantos, la ayudara a combatir su más grande obstáculo, Bernabé Borondongo, el hechicero. Borondongo, como su oficio lo da a entender, era enano. El hombre que se dejo atrapar por los encantos de Guiñol fue Hernando “Chato” Latorre Senior. Al verla, el Chato gritó “doy tres cuartas partes de un testículo y mi capacidad inigualable de interpretar papeles de cachaco que hacen época por solazarme con usted, muchachita linda!”.

Guiñol sabía distinguir entre el bien y el mal y supo desde el primer momento que con el Chato harían un tandem imbatible contra Borondongo. Fueron pues, el Chato y Guiñol en busca de este detestable brujo.

En el camino, Guiñol actualizó al Chato acerca de los motivos por los cuales iba a buscar a Borondongo y el Chato, a su vez, puso a Guiñol al tanto de los nombres que están en el sonajero para conformar la nueva Comisión Reguladora del Inurbe.

Enterado de todas las aventuras y desventuras de Guiñol, el Chato juró ayudar a su nueva amiga a conseguir la felicidad y en una de esas, ver si era posible acostarse con ella pues, como lo mencione anteriormente, Guiñol mantenía con muy buena bola.

En una vera del camino, el Chato, cansado, sugirió parar unos minutos a descansar. Hicieron lo propio en un potrero. Momentos después de sentarse a disfrutar de tan merecido descanso, los ojos aún saludables de Latorre divisaron algo que le recordaba sus años de infancia, nada mas y nada menos que hongo de estiércol de caballo. Ambos consumieron su porción del alucinante refrigerio. Como esta era la primera vez que Guiñol entraba en tan bonito trance, vale mucho mas la pena dedicarnos a lo que ella vio que a la muy seguramente aburrida alucinación de Latorre.

Dice la corresponsal que Guiñol, principio a mascar el hongo y no fue sino después de parpadear tres veces que se vio a ella misma en la Media Torta deleitando al publico con una canción titulada “Diagnostico: Patria” que decía así (cántenla conmigo, a ver! Todos juntos!!):

2 Comments:

  • muchacha de pezón erecto y de sapote prieto, jajajajaja, tal vez yo me quiera solazar también con guñol en medio de su viaje supersónico gracias a los efectos del reino fungi o micota.

    By Blogger kiny, at 8:39 p. m.  

  • "Altamente irreverente y mordaz."
    El Espacio

    "Una comedia de lo absurdo y genial."
    Boletín del Sindicato de la EAAB

    "A provocative tribute to onanism and to the darkest crevasses of human perversion. Simply twisted."
    Chicago Tribune

    "A keen narration that oscillates between insanity and geniality."
    The Onion

    "Only time will allow mankind to truly understand the perverted mind behind this story."
    National Enquirer

    By Blogger Jor-jeto, at 8:48 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home